Versos de antaño
muchos años han pasado desde que los escribí,
mas hoy siento que mis manos
los vuelven a escribir.
llena mis sentidos, me da paz,
las hojas tranquilas, el cielo oscureciendo,
un cigarrillo y mis pensamientos.
Es agradable sentirse así,
sin preocupaciones, sin problemas, aunque solo,
pero es esta soledad la que me llena,
todo es calma, es maravillosa esta tarde.
Fuera, la vida sigue su curso,
todo alegría, tristeza y vida pura,
la vida de hoy en día, que no es la mía,
pues ésta, está fuera de todo,
aunque va cayendo en la misma rueda
que vertiginosa gira sin detenerse,
pero en este momento, todo es paz,
la que deseo encontrar siempre,
aunque sea un instante cada vez.
Eres la ilusión,
una canción al viento
no, sólo el lamento
de este solitario
que camina sin sentido.
Sigo,
ya no se realizará ese pequeño
sueño mío
pensaré en ti, te nombraré,
nadie responderá.
Debo borrarte de mi
no quiero,
quiero tenerte conmigo
y no puede ser.
Camino bajo las estrellas, pienso.
La tarde estuvo apacible
las aguas calmas,
temprano, el frío reinaba.
Mi mente convulsionada se retuerce,
mi corazón se agita presuroso,
ya las lágrimas saltan de mis ojos,
¡no! No puedo seguir.
Recuerdos, no quiero sentirlos
me hacen daño ¡basta ya!
¿Por qué no llega el fin?
Mas sufrimientos no quiero,
la vida ya me los ha dado y basta,
¿dónde está mi hogar, mi casa?
la busco, no está ¿qué hacer?
Quiero morir, acabar este dolor.
Quiero vivir. Seguir. Amar. Sufrir.
¡no! ¡no! ¡no, Dios mío!
Mi alma está llagada en mil partes,
estas llagas no se cerrarán,
vivas, vivas estarán por siempre,
de mi lado no se separarán.
Amor, sentimiento puro.
Pasan los años, y ...
¡no!, no quiero pensar
¿dónde está la felicidad de otrora?
Yo, maldito sea mil veces,
maldito el instante en que mis ojos
mis pequeñuelos ojos vieron la luz.
Cómo quisiera no saber nada,
estar ausente en cuerpo y alma,
cómo deseo dormir, ..., dormir
y no despertar sino en sueños,
pues la realidad no quiero vivirla,
¡quiero acabar! ¡si!, eso quiero.
¿Quién comprende mi dolor?
nadie, nadie jamás lo comprenderá
mi angustia nace con el alba
y ya no se apaga mas.
Río, por fuera si, ¡por fuera!
mientras se despedaza mi ser, mi fe,
mientras todo se tiñe de rojo, a mi lado,
mientras el amor escapa, escapa, escapa
y queda solitaria
mi vida, cada vez mas.
No, ya no puedo luchar,
lo único que va quedando es la llegada
la tan esperada llegada: la muerte.
Quince años pesan en mis hombros
en los cuales se ha mostrado cruda, hiriente,
esta inmundicia de vida
en la cual sólo hay maldad, dolor,
en donde la felicidad poco se encuentra,
en donde no existe la comprensión.
Rojizas mis pupilas, por la congoja
que brota, que ha brotado,
que seguirá brotando
hasta que al final... ¡por fin!
por fin podré descansar
en el sueño eterno.
¡Calla!, calla que me hace mal
oír esa voz que tortura mi ser,
¡calla!, basta ya de palabras
de decir ... ¡no! ...¡Calla!
¡Dios mío! Guía mis pasos
por el buen sendero hasta el fin,
se que estoy ya perdido
pero, no importa, seguiré ...¡seguiré!
aunque se me parta el alma
y mil lágrimas hayan bañado mi cuerpo
mil y una veces.
¿Por qué torturo así mi vida?
¿por qué el llanto desgarra mi risa?
ya no puedo pensar
sólo puedo esperar ... esperar
¿Cuándo llegará el fin?
con los brazos abiertos lo recibiré,
con mi corazón yerto a tus pies,
a tus pies Dios Santo.
Que poco camino ha recorrido mi vida
y cuánto me ha mostrado en su curso
lo mas ha sido tristeza, soledad.
En mi alma no hay cabida para la felicidad
lo único que veo al mirarla es ... ¡basta!
La noche me mira, los leños crepitan,
el calor está dentro y yo aquí ... fuera,
sin nadie que consuele mi pena
sin nadie que me de un pedazo de pan,
pero eso quiero: morir de hambre
solitario, sin nadie a mi lado.
Vida, todo lo que me has dado está aquí
Gracias por la alegría
Gracias por el dolor.
Mis palabras necesitan escapar
mis sueños quieren volar lejos
las ideas se transforman, se pierden
la ilusión poco a poco se muere.
Soñador de sueños perdidos
vagabundo escapando al mañana
tiempo perdido entre voces,
encerrado al televisor.
Ideas que se entrelazan
dolores que me abruman
risas que se apagan
realidad perturbadora
que opaca la luna
nubes que cubren mi corazón
destino loco que se me va.
Ya no más irrealidades
vivir el presente y futuro
dejar atrás los recuerdos
hacer nuevos caminos
volar hacia lo alto
pintar nuevos colores.
Debía suceder alguna vez
la flor tenía que besar el sol
el silencio contemplar dulzura
el amor susurrar una canción.
Tiempo, instantes ya idos
recuerdos vueltos a la realidad
momentos ya vividos
esperanza del encuentro casual.
Silencio, soledad, cielo profundo
testigos del devenir del encuentro
de la espera larga y deseada
del instante sublime, único
y ya nunca más, nunca más será
fue sólo un pensamiento que pasó
fugaz, frente a mis ojos.
Una montaña cubrió el sol
la oscuridad llegó y el silencio
interrumpido por el canto nostálgico
de un vagabundo se oyó.
cuando sientas todo oscuro,
y ya no puedan tus ojos mirar,
entonces del fondo de tu alma brotarán
las lágrimas que nunca derramaste.
Cuando quieras volar muy alto
y solamente mirar hacia arriba puedas,
cuando tu voz hueca suene
y nadie conteste tu llamada,
cuando quieras besar el amanecer
y sólo la penumbra del atardecer veas,
cuando quieras cantar una canción
y no puedas recordar melodía alguna,
cuando llores a solas en un cuarto oscuro
y no haya quien consuele tu tristeza :
ya tarde será para volver atrás.